La fabricación por contrato de cápsulas se refiere al proceso de creación de un complemento alimenticio que consiste en una fórmula nutracéutica encerrada en una carcasa dura. Formadas por dos mitades prefabricadas, las cápsulas, una vez rellenas, se cierran herméticamente con finas ranuras que impiden que la cápsula se deshaga y que el polvo se escape. La ventaja de esta envoltura es que facilita la descomposición del suplemento en el tracto digestivo, permitiendo que su contenido sea absorbido por el torrente sanguíneo.

Los suplementos en cápsulas son comparativamente fáciles de digerir, lo que significa que la tasa de absorción de los ingredientes nutracéuticos es relativamente mayor en comparación con otros métodos de consumo, como los comprimidos, que pueden tardar más tiempo en descomponerse y liberar su ingredientes activos. El proceso de fabricación de la cápsula, que encierra la fórmula nutracéutica en una carcasa dura, no sólo ayuda a proteger los ingredientes de la degradación, sino que también funciona como una barrera al oxígeno, conteniendo cualquier sabor u olor desagradable de los ingredientes nutracéuticos, lo que reduce la necesidad de utilizar agentes enmascarantes.